Bueno, creo que el blog está un poco de capa caída, pero lo dicho, tengo una vida...jajaja. Ahora en serio, no voy a dejar de hacer otras cosas para escribir en el blog, pero también es cierto que es que no tengo mucha inspiración y nunca me ha gustado publicar tonterías (si alguien opina que publico alguna tontería, bueno, no lo hago consciente de que lo sea ^^). Dicho esto, NO os voy a desear una feliz Navidad, lo cuál no quiere decir que no os la desee, pero la entrada no trata de eso. Trata del poderoso influjo de la Navidad. ¿¿¿El qué??? Sí, ese nosequé que tiene la Navidad y que hace que no puedas ignorarla, sólo adorarla u odiarla. No soy la típica obsesa (oh, sí, es una situación TÍPICA) que sigue cientas de páginas en Facebook, pero aún lo hago de unas cuantas y la mayoría mencionan la Navidad de uno u otro modo, ya sea para felicitarla, como suele ser, o para hacer burla de ella. Por ejemplo, Rolling Stone España hacía una lista de canciones anti-Navidad, prueba de que si no la felicitas, es porque la odias (dudo que en RS odien la Navidad, pero ahí está, o haces una mención pro-navidad o justo lo contrario, cómo vas a ignorarla). Morri (El mundo está loco) daba su visión de los niños que cantaron el Gordo. En The Key of Awesome cambiaban la letra a un villancico para hacer un repaso de los vídeos del último año y ofrecían a su Ke$ha particular para felicitar la Navidad a tus amigos en Facebook, al modo Ke$ha por supuesto. Y así un largo etcétera. Es una de esas normas no escritas, como que yo sólo me ponga mala en vacaciones. Aunque al menos es currar un poco más para adaptarse a la situación, porque en realidad sí que hay una tercera reacción ante la Navidad en la que no había pensado y que es propia más que nada de la tele: ¡usarla de excusa para colarte reposiciones! Ponerte episodios navideños de los Simpson aunque los hayas visto mil veces e incluso aunque sean más malos que pegarle a un padre, películas viejísimas pero muy navideñas también, y los geniales programas de "lo mejor del año", que prefiero no comentar porque me enciendo, me limitaré a decir que "mejor" es un concepto que se toma muy a la ligera.
Claro que, en cierto modo, lo entiendo. Es algo muy simple. No puedes dar un paso sin encontrarte con algo navideño y no puedes dejar de hablar de algo que está por todas partes, con lo que contribuyes a la expansión, afectando a todavía más personas. De hecho, y voy a terminar contandoos un secretito: ¿os habéis percatado que ni yo he podido escapar al influjo navideño?
La verdad es que en un principio tenía intenciones más amables, iba a hacer un dibujo a lo felices fiestas, pero parece que se me da mejor quejarme que dibujar.
¡FELIZ NAVIDAD A TODOS!